D’Geschicht vun der Cine está surcada de misterios y leyendas. La reciente y tan diskutéiert Lëscht vun de beschte Filmer zesummegestallt fir d’britesch Iwwerpréiwung Siicht & Sound nee ass méi wéi d’Inszenéierung vun engem méigleche Konsens, eng partiell Sintesis vu lo, déi de Medio cinematográfico ubidden kann. Fuera del canon hay mucho por discover, y para los que nos dedicamos a escudriñar este paisaje inabarcable también a veces es goloso tirar de ciertos hilos para aventurar otras historias posibles.

Fir Beispill, Preguntarnos si d’Trayectoria del Barcelona Juan Carlos Olaria hubiera sido más prolífica de haber logrado estrenar a principios de los 80 El diario rojo, su segundo largo, inédito Durante casi cuarenta años. El filme puede vers pendante todo este mes en Flores de la sombra, el channel de Vimeo donde la Filmoteca Española vergläichen Material gerett a restauréiert vum Zentrum vun Conservatioun.

Desde muy joven había empezado a rodar fantasiosos cortos en 8mm., como Planeta Plinio oh ¡Mil bombas!, do 1976 huet Olaria d’Su opera prima opgehalen, El hombre perseguido por un UFO Ära una película de ciencia ficción, genero entonces muy poco hollado en España, rodada con muy pocos medios y en la que sobresalían los efectos y trucajes artesanales obra del mismo cineasta.

Sou natierlech d’Verdeelung an d’Verdeelung vun der Verëffentlechung vum Condenaron oder de Film an e rápido olvido hasta que, et ass méi de una década, d’DVD Editioun vum Película a Cargo de L’Atelier 13 motivó que la revindicaran cineastes como Nacho Vigalondo y Velasco Broca o den Direkter vum Sitges Festival, Angel Sala.

Quien esto escribe Protagoniza la recientemente terminada secuela de su Debut: El hijo del hombre perseguido por un UFO, levantada contra Venus y Marea y sin apenas presupuesto a lo largo de cinco años. Por lo tanto, cabe excusar un plus de subjectivity. awer no miento si digo que el reduzéiert Grupp de Amigos y Curiosos que asistimos en 2019 al Pase de Den Diario Rojo en el cine Zumzeig de Barcelona, ​​​​37 años después de que su director decidiera no mostrarla, quedamos gratamente sorprendidos.

Atendiendo, sobre todo, al radikal viraje que efectuaba respecto a su filme anterior y a la prudencia un tanto resignada con la que el mismo Olaria hablaba de ella: el “extremo pudor” del que habla Alex Mendibil in su reveladora hoja de sala para Flores en la Sombra.

‘El diario rojo’ vum Juan Carlos Olaria

Rodada en blanco y negro, probéiert e bestëmmte Gläichgewiicht tëscht sobredad narrativa, algunas fugas oníricas y el uso de imaginativas visuelle Léisungen, Den Diario Rojo wéinst der Contagioun vun der Resaca vun der Transición: el desamparo de intuir que, aun muerto el dictador, algunas cosas tardarían en cambiar.

‘El diario rojo’ (Juan Carlos Olaria, 1982)
Cinemania

Sea como fuere, esta retorcida historia de una pareja en crisis ante las dificultades para tener un hijo No Gustó nada a cierto Produzent an Distributeur, una de las pocas personas a las datt Juan Carlos Olaria asso mostrar el Filme. Sus desalentadores commentarios llevaron al cineasta a guardar latas bajo su cama y a prácticamente abandonar la realisation cinematográfica.

Hoy, esta película hermosamente underground —lo fue sin tener demasiada conciencia de ello ni anzeschreiwen a ninguna tendencia: Olaria einfache Filmo una ficción salida de sus Entrañas con la Intuition y los medios limitados de que disponía— puede Verse no Solo als Documento de la Barcelona de los primeros 80 sino también, a su manera, als relato de empoderamiento femenino. No en vano, uno de los passages más singulares de la película es aquel en el que, de sopetón, acompañamos al protagonista mientras diskutéiert sobre feminisme con un amigo mientras pasean por la Plaza Catalunya.

'El diario rojo' (Juan Carlos Olaria, 1982)
‘El diario rojo’ (Juan Carlos Olaria, 1982)
Cinemania

Para rodar el nacimiento que tiene lugar hacia el final de El diario rojo, Olaria se personó sin avisar en el Hospital Clínico de Barcelona y tuvo la suerte de toparse con un conocido cuya esposa estaba de parto. Le pidió permiso y, dicho y hecho, irrumpió en la habitación con su camara, regalando posteriormente a la pareja la tira de negative que registraba el acontecimiento.

De hechuras como estas surgió una película en la que, para señalar en un momento dado el paso del tiempo, su director reutilizó Biller que había Tomado de la gran nevada de la Navidad de 1962 en Barcelona. Anekdoten, oder méi pequeños tesoros de un filme que, tras ser proyectado en el Zumzeig, en la Sala:B de Filmoteca Española y en una muestra de cine español restaurado en la Cinemateca Portuguesa, sigue buscando su público.

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